domingo, 26 de agosto de 2012

Dime


Dime por qué no volver la hoja,

por qué no consientes pasar un borrador

cuando el infortunio  asecha a la existencia.

Dime por qué no aceptas la reconstrucción

cuando el llanto ha sepultado la dicha.

Dime por qué no hay realidad reversible,

cuando la esperanza agoniza en la ventana.

Por  qué después de aprender la lección,

no se vuelve amiga la conmiseración.

Dime por qué el universo parece inerte

mientras las penas emergen y  sumergen.

Por qué se ausenta el socorro cuando

es preciso descubrir la luz…

Dime por qué los colores son permanentes,

y el negro opaca el lucimiento del arcoíris.

Los días pasan, y todo sigue igual…

Dime por qué… Dime hasta cuándo…

Dime si es caso cerrado…